30 de septiembre de 2011

QUERIDA EX.

.

Espero que las cosas que ahora sabes de mí te parezcan buenas. Lo preferiría. Yo no sé mucho de ti, desde que hace un tiempo –por ti o por mí- decidimos que nuestras vidas iban a ir por caminos separados, y la verdad es que algo que me llegara de ti me gustaría que fuera bueno. Yo no dejo de preguntarme si te cuidan y te aman, si hay alguien que va contigo de la mano por la calle. Alguien que presentas a tu familia y a tus amigos.

No es bueno olvidar que ir contigo de la mano era mi aventura de aquellos días. Tampoco debería ignorar tanta música buena que de no haberte conocido ni me habría planteado escuchar. Y entre la gente que te rodeaba, conocí a gente auténtica. Eso no lo voy a olvidar y no te lo voy a dejar de agradecer. Y fíjate que ahora que no estoy contigo, me da por pensar en las calles y en las casas de tus amigos, en todo eso que estoy dejando de visitar y conocer… Y no puedo evitar pensar que a lo mejor me estoy perdiendo algo bueno, con esto de habernos separado. En fin.

Las cosas que te pasan en la vida traen cosas que te vienen bien en el momento. Y las coges y todo está chachi. Pero para conseguir el meollo de esas cosas, tienes que ponerte en juego… ¿te acuerdas del tiempo en que nos poníamos en contra de cualquier cosa con tal de estar juntos? Yo sí me acuerdo. Claro, aquello era mi vida, y eso ha puesto su parte en lo que soy ahora. Superar día a día grietas y escalones entre nosotros, me hacía digno de tu amor. Por todo lo bueno, pienso: gracias. Y por dentro mientras lo digo, me imagino un plano general de una pradera de yerba alta movida por el viento, y yo voy volando a ras pensando: gracias, gracias, mientras la cámara se va alejando de mí, abriendo más el plano. Y yo me voy alejando pensando: gracias, y entra la música de los créditos de mi película de despedida…

Lo bueno pasado te pone melancólico. La melancolía no es buena para el presente, es muy pasiva. Tú no te pongas melancólica, amor. Haz como yo: acuérdate de aquellas cosas nuestras –de nuestro amor- que incluso hoy te ponen la carne de gallina. Verás cómo te activas, te relames los buenos recuerdos y a otra cosa.



.

No hay comentarios:

Publicar un comentario